Parece una receta simple, hasta podría pensarse que insuficiente, pero entraña compromiso y creer. Lo ha comentado la capitana Andrea Vilaró antes de viajar a Suiza y responde a la realidad que atraviesa Perfumerías Avenida, hay que SEGUIR. El baloncesto no espera y las azulonas deben mirar hacia adelante con toda la esperanza y aún más ganas si cabe tras sufrir una semana tremendamente dolorosa. Como «playa» a la que llegar, d momento, el parón que arranca este fin de semana para lo que es vital sumar los dos partidos en apenas 48h a que comienzan a enfrentarse mañana. Para empezar, tras viaje a Suiza, mañana a las 19h ante Nyon (DIRECTO Youtube FIBA) buscando, además, la clasificación matemática para la siguiente fase que ya es un premio suculento en sí mismo.
Huelga decir que no es sencillo abstraerse de una situación dura con tres derrotas en siete días, pero no es menos cierto que quedarse en el lamento y mero análisis del pasado sería un craso error. Hay que continuar y hacerlo con trabajo más duro, con más concentración, creyendo que se puede ver al verdadero equipo que se observa en cada entrenamiento también en los partidos. Se estudia, se corrige y se sigue trabajando a pesar de que el tiempo corre demasiado en estos momentos, y más en una semana de locura que llevará a jugar en Suiza y Salamanca con apeenas 48h de diferencia, con todo lo que ello conlleva.
Ese tiempo de preparación que ha vuelto a brillar por su ausencia con una única sesión en casa ayer y el viaje a primera hora de hoy hasta Ginebra, para poder ya entrenar esta tarde en el escenario del partido. Hará bien Avenida en pensar que ganar puede ser un bálsamo, sí, pero, sobre todo, es un billete para estar en la siguiente fase y quizás matemáticamente incluso como primeras de grupo, lo que daría tranquilidad a falta de una jornada. Ganar o ganar. El equipo es consciente y, a pesar de que las piernas pesan, saben que mañana es día de esfuerzo triplicado, con todas disponibles a excepción de Regan.
Apura sus opciones de clasificación Nyon, que ya sorprendió a Panathinaikos en Grecia hace dos semanas con un juego rapidísimo, donde el uso y abuso del triple es total y, si tienen el día, casi mortal. Así aguantaron en Salamanca hace un par de semanas durante medio partido y, jugando en casa, será un rival aún más complido. El estado de forma de Formann, Uro Nillie o Robinson son claves en el duelo de mañana.